En Wikipedia podemos encontrar una definición bastante precisa de lo que significa la palabra algoritmo: es un conjunto preescrito de instrucciones o reglas bien definidas, ordenadas y finitas que permite realizar una actividad mediante pasos sucesivos que no generen dudas a quien deba realizar dicha actividad.
Siempre me ha hecho bastante gracia la preocupación de educadores, profesores, familiares, entrenadores... por solucionar las dudas. Me acuerdo cuando me recomendaban, como entrenador, que me tenía que ganar el respeto de los jugadores solucionándoles las dudas... Bien, puede que en ocasiones sea así, no lo voy a negar categóricamente, pero creo que no es una regla ni mucho menos general. Vamos, que no es un algoritmo.
Evitar la duda es precisamente evitar el conocimiento. Una persona solamente tiene dudas cuando analiza lo que sabe y reflexiona sobre lo que no sabe. No es que nuestro trabajo como entrenadores dependa de solucionar dudas: es que precisamente, gran parte de él debería ser generar las dudas correctas.