Que vivimos en un país donde se cambia de opinión o discurso con asombrosa facilidad es algo que tengo más que asumido. País, estado, nación... ya sabemos que cada uno elige el término que más le conviene. De esto último es precisamente de lo que hablo: de conveniencias. Porque convenidos hay unos cuantos... Y sobre esta cuestión, tan clara como está, no se pueden levantar muros.
En las últimas semanas prácticamente no he parado de leer o escuchar críticas casi a cualquier cosa: mala preparación, falta de intensidad, de hambre, de acierto, de ausencia de un tirador, a Rudy, a Claver, a Sergio Rodríguez, a Mirotic...
Parece evidente que la preparación podría haber sido mejor. La mayoría habla del bajo nivel de las selecciones contra las que se ha jugado (aunque jugamos contra la ya actual campeona del FIBA América), pero a mí me llama mucho más la atención que todos los partidos fueran en España y con árbitros españoles. Y si apuramos, a la misma hora. Para mí es mejorable, pero claro... No voy a obviar que la Federación tiene que encontrar recursos y la ÑBA todavía vende. Sí, todavía, porque desgraciadamente está dando sus últimos coletazos y esto es algo sobre lo que poca discusión puede haber.
Sobre la falta de hambre, en cambio, sí que podemos discutir. Se ve intensidad defensiva en muchas ocasiones, momentos brillantes, etc. Pero claro, es que estamos hablando de jugadores con una calidad más allá de toda duda: Pau Gasol, que da muestras de clase por los cuatro costados y le gusta callar bocas de vez en cuando, los madridistas, que han dado una exhibición esta temporada, Mirotic y su gran año rookie... Pero hay unas lagunas en la concentración que, si no se pueden achacar a la falta de hambre, yo no les encuentro explicación (bloqueo de rebote, rotaciones defensivas, etc.).
En el partido de ayer no se pudo contar con Rudy Fernández. Recordemos... un jugador que lleva 12 años ininterrumpidos con la selección absoluta (dejemos al lado las selecciones de formación por ahora). Jugando con dolor desde el minuto 1 y que no ha podido participar en octavos de final, por dolor y por honradez. ¿No es mejor dar un paso a un lado y que juegue un compañero que está al 100%? Su juego suele ser siempre muy inteligente y en la anotación, cuando estás mal físicamente, es difícil responder. Pero aporta en tantas facetas del juego que se me hace muy difícil ver a España en semifinales sin su participación. Que haya gente que piense que se borra en ciertas ocasiones me produce cierta sorpresa. Rudy es Rudy. Él juega a su baloncesto e intenta aportar en lo que puede. ¿No querría meter 30 puntos por partido siempre? Quizás aquellos que hoy dicen que se borra, dirían que es un individualista si así sucediera. Para mí que la gente confunde otras cosas que no tienen que ver con su juego, ni con su compromiso o sus sentimientos.
De todas formas, el preferido del aficionado crítico es Víctor Claver. Muchísima gente se pregunta cómo un jugador de sus condiciones no es una superestrella... Pero qué queréis que os diga... ¿acaso él no querría serla? ¿Ha estado tumbado en un sofá durante sus difíciles años en la NBA? ¿Qué es lo que pasa? ¿Que no ha entrenado? ¿Que no se esfuerza? Vamos a ver... ¿acaso no tiene derecho a que la gente lo acepte tal y como es?
Después de un paso testimonial por el campeonato hasta ahora, normalmente jugando de 4 tras hacerlo de 3 durante toda la preparación, ayer disputó la inmensa mayoría de sus 25 minutos de alero. 25 minutos que lo convierten en el segundo jugador con más minutos disputados, junto con Sergio Rodríguez. ¿Y no respondió? Tercer máximo reboteador, buena defensa, un triple importante... 2 pérdidas, sí, y una de ellas que probablemente nos desesperó a todos... pero imaginándome su estado psicológico, tuvo un rendimiento más que sobresaliente. Sólo 5 de valoración, pero un +/- de 12 y mi sensación, particular, de que fue un plus muy importante para terminar ganando el partido. Pero con él, me temo, nunca será suficiente... quizás porque simplemente ha intentado ser el mejor jugador que ha podido ser, pero no ha llegado a lo que la gente esperaba. Nada más injusto. Nada.
En 2006 la selección española fue Campeona del Mundo. La sensación es que jugaban mucho mejor que ahora. En el recuerdo queda la segunda unidad de aquel equipo, con Sergio Rodríguez y Rudy Fernández regalándonos un alley-opp por partido. Jugadores importantísimos en la cúspide de su forma física... y llegando a la final, recordemos, tras un tiro fallado por Nocioni. ¿Era tan diferente? No dudo de que el sistema de juego lo fuera, pero me pregunto si nuestros recuerdos, a veces, no nos juegan malas pasadas. Porque la selección del Eurobasket de España se recuerda "de mala manera" por la exhibición defensiva que se marca Rusia en la final y me pregunto si había mucha diferencia real entre aquel equipo y el del año anterior. En nuestros recuerdos desde luego... ¿y en la realidad?
Los detalles son fundamentales. La velocidad, todavía más... y una o dos décimas de segundo marcan la diferencia en un deporte como el baloncesto. Y las décimas se van con la edad. No, ya no es nuestro Dream Team español, pero es el mejor equipo que tenemos. ¿Se les puede pedir más? Creo que hay que asumir, simplemente, que son humanos, y que no siempre se puede ganar, ni pillar chapa, ni siquiera jugar bien... ¿Es que los demás no juegan o qué? Así que el martes, otra vez, me sentaré a intentar disfrutar y esperaré que todos hagan lo que deben hacer, lo mejor que saben hacerlo. Porque cuando uno da todo lo que tiene, ¿quién tiene derecho a exigir más?
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