La sangre se lava con sangre

Hay que ver. El éxito puede transformar en bueno casi todo lo que nos lleva a él. Por algo Maquiavelo ha pasado a la historia y ha dejado en ella un adjetivo que con casi toda seguridad nos acompañará siempre. Y no, no siempre el fin justifica los medios.

Este verano, Lucas Mondelo dejaba una frase también para el recuerdo: "La sangre se lava con sangre". La pronunció en un tiempo muerto y el objetivo que pretendía con ella estaba más que claro: venganza. Se puede llamar o maquillar como se quiera, pero apeló a cierto espíritu vengativo para que sus jugadoras no bajaran la intensidad, recordando un episodio anterior donde sufrieron lo que desde su punto de vista fue una humillación. Totalmente respetable. A veces los entrenadores decimos una cantidad de salvajadas que después, analizándolas fríamente, ni siquiera nosotros las comprendemos... o simplemente llegamos a la conclusión de que podríamos haber elegido otras palabras o ejemplos mejores.

Otra cosa es que la frase que mencionaba antes del seleccionador suscitara algunas risas entre ellas. Supongo que habría que tener en cuenta que varias de las internacionales no estaban el verano anterior, lo cual nos lleva a que varias de las que sí que estuvieron no estaban en el Campeonato de este verano... Era caro estar en un equipo donde "todas" las jugadoras eran tan "jóvenes".

Qué difícil es hacer una selección. Aunque no sé por qué decantarme: si por confeccionar una selección o por entrenar una selección ya hecha... Lo que seguro que se me daría fatal sería mentir a la prensa; tanto o más que ser periodista y no poder preguntar lo que yo quiera.

"La sangre se lava con sangre" se parece mucho a aquello de "Ojo por ojo y diente por diente". Es un mensaje muy claro, no creo que hagan falta demasiadas explicaciones. Ahora bien, vamos a suponer que todo el que escucha esa frase piensa que el seleccionador español, flamante campeón de casi todo lo que había jugado ese año (Liga China, Campeonato de Europa...) está sentando cátedra... Vamos, que esa es la receta del éxito. Por desgracia, mucha gente se ha agarrado, se agarra y se agarrará a este clavo ardiendo.

Trasladar el modelo de baloncesto adulto a chicos y chicas que se inician en el baloncesto, la mayoría de veces a través del minibásket, es un error de bulto técnico/tácticamente porque se están aniquilando dos de los principios básicos del desarrollo motor: la universalidad y la intransitividad. Ahora bien, si todo el problema fuera técnico/táctico yo no lo vería tan grave... pero es que no es solamente eso: ahora hablamos de que también se adoptan comportamientos y motivaciones adultas, frases de profesionales que abultan más que algunos niños.

No todo es adoptable ni adaptable.. No todo es utilizable. Nuestro trabajo como entrenadores no siempre es adaptar. También hay que crear... y para crear, cuanto más lejos quede Maquiavelo, mucho mejor.