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viernes, 25 de enero de 2013

El genio, el talento

Drazen Petrovic
El talento no es nada. Hay demasiado talento, hay talento por todas partes. Trabaja, trabaja, mátate a trabajar...

Esta frase es de Charles Chaplin. La puso de moda su hija Geraldine en un reciente anuncio de televisión. No obstante, yo quiero matizar algo: querer trabajar también puede ser una cuestión de talento. 

Este año, los Nets probablemente jugarán en Zagreb para conmemorar la muerte del genio de Sibenik. Un genio que se forjó a sí mismo en interminables sesiones de técnica individual para terminar dominando prácticamente a su antojo toda Europa. El viejo continente se le quedaba corto... pero aún así, la NBA lo eligió en una 3ª ronda del draft... puesto 60. Eran otros tiempos. Sin problemas. Los ganadores terminan triunfando siempre.

Así, recién llegado a Portland, se encuentra con un entrenador que no contaba con él. Curiosamente, el mismo entrenador que hoy en día dirige un equipo donde 4 de sus titulares habituales son 2 rusos, 1 montenegrino y 1 español. Eran otros tiempos. No se "llevaba" el tener a un europeo jugando muchos minutos. Muy pocas excepciones... aunque me pregunto que si él no se merecía la oportunidad... ¿entonces quién? Pero ahí estaba el genio. Ahí estaba el talento: interminables horas de trabajo, de gimnasio, de tiro... Todo para demostrar en América lo que estaba cansado de demostrar en Europa: él era el mejor. ¿Por qué no se daban cuenta? Y encima viviendo en la distancia una maldita guerra...

Menos mal que llegó a New Jersey y apareció, de pronto, un jugador que se convirtió casi de la noche a la mañana en el tercer escolta más anotador de la NBA, integrante de su tercer mejor quinteto en la segunda temporada completa con New Jersey, a la postre su última temporada. De hecho, sólo le superó un tal Michael Jordan como escolta "puro"...

A finales de primavera, principios de junio, hará 20 años que dejó de dar exhibiciones: de talento, de trabajo, de carácter... He encontrado un vídeo espectacular sobre él, uno de tantos, pero no es un homenaje merecido.

A él le gustaba trabajar, trabajar y trabajar. Entrenar, entrenar y entrenar. Mi homenaje no es el vídeo con el que concluyo, sino quizás uno más profundo y a la vez más humilde y sincero: hablarle a las jugadoras que entreno sobre él. Entrenar los movimientos que él perfeccionó a base de trabajo, a base de talento. Sin duda, será la mejor manera de que el genio, el talento de Drazen Petrovic perdure por siempre. Ése es y será mi pequeño homenaje.

5 comentarios:

  1. Un jugador que es capaz de entrenar,por si mismo, su técnica individual imaginando situaciones y trabajando sobre esas situaciones distintos gestos tiene,como bien dices, ese talento para entrenar.

    La ambición por mejorar y buscar el límite, más ese talento resumen lo que era Drazen petrovic.

    NS

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    1. Efectivamente. Es un talento que también se puede educar, pero siempre existirá el debate sobre si son los genes los que favorecen que se sea inconformista. Drazen, y sobre todo lo demostró en la NBA, era un inconformista.

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  2. yo lo vi jugar aquí en Puerto Real cuando se hacia los torneos de baloncesto en memoria de Hector Quiroga,era una maravilla,al igual que Fernando Martin, que no llegaron a culminar en el baloncesto por su pronta muerte.Tengo hasta fotos con ellos.Me ha encantado el video, cuando lo he visto mi hijo enrique se asemeja un poco a él.Mi marido Quique jugo aqui en Pto Reak con él.Soy Mila la madre de Andrea Sanchez

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    1. ¡Vaya! ¡Increíble! ¿No hay videos sobre aquello? Sería espectacular verlo.

      Un saludo y me alegro de verte por aquí.

      Gracias por comentar.

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  3. Tal vez Tele<puerto Real puede que tenga grabaciones de alguno de los torneo.Intentare conseguir algún vídeo, atreves de una amiga que trabaja alli.
    Mila

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